Charla del Día (Monólogo de un empleado)

«Al fin se ha venido a caer en la cuenta de que el ser empleado no es un obstáculo para estar exento de necesidades, y que bien se puede por el día asistir a la sección tercera o cuarta de cualquier ministerio y saborear por la noche un sustancioso beefsteak o, en su defecto, un nutritivo plato de lentejas. ¡Bendigamos al señor ministro de Hacienda que después de siete meses de profundos estudios ha hecho este importantísimo descubrimiento!»

Carlos Díaz Dufoo


  • Charla del Día (Monólogo de un empleado)


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    Carlos Díaz Dufoo

    Carlos Díaz DufooCarlos de la Concepción María Díaz Dufoo nació un 4 de diciembre de 1861. Escritor, periodista, economista y dramaturgo. Su padre, Pedro Díaz Fernández, era de origen español pero naturalizado mexicano, y doña Matilde Dufoo, su madre, era veracruzana.

    A los 6 años de edad su padre decidió partir con toda la familia para Europa y vivieron en Madrid, Sevilla y París. Al cumplir 21 años Carlos decidió regresar a su tierra natal en 1882.

    Una vez en México, empezó formalmente su carrera periodística: escribió en La Prensa (1884-1885), de don Agustín Arroyo de Anda, y en El Nacional (1885-1886), de Gonzalo A. Esteva.

    Durante 1887 estuvo en Veracruz; radicó en su ciudad natal para dirigir El Ferrocarril Veracruzano, y de allí pasó a Jalapa, donde se hizo cargo de la Bandera Veracruzana, pero su estancia en el estado veracruzano fue breve. Cuando volvió a la Ciudad de México continuó con su labor de periodista colaborando en El Siglo Diez y Nueve, El Universal y El Partido Liberal.

    Dos de sus proyectos periodísticos más importantes fueron fundar, junto con Manuel Gutiérrez Nájera, de la Revista Azul (1894-1896) y colaborar, desde su fundación, en El Imparcial (1896), al lado de Rafael Reyes Spíndola.

    Díaz Duffo también fue miembro fundador de otro de los diarios más importantes del país, Excélsior (1917), donde colaboró hasta su muerte en 1941. Utilizó el seudónimo Argos.

    Carlos Díaz Dufoo publicó Cuentos nerviosos (1901), en 1929 Padre Mercader y Allá lejos, detrás de las montañas (1929); La fuente del Quijote (1930); en 1931 Palabras y La jefa, así como Sombras de mariposas. Comedia mexicana en tres actos (1936).

  • Comentario de Charla del día (Monólogo de un empleado)

  • Carlos Díaz Dufoo, Argos, “Charla del Día (Monólogo de un empleado)”, en El Nacional, año vii, t. vii, núm. 140 (28 de junio de 1885), p. 2

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